Cien peregrinos realizan en barco la ruta El Camino a Vela
29 jun 2023 . Actualizado a las 15:14 h.Para cualquier peregrino, Santiago siempre será el punto y final del viaje. En cambio, el origen puede estar en cualquier parte del mundo. A más de 1.150 kilómetros de distancia, desde la ciudad francesa de La Rochelle, partieron a principios de este mes de junio un centenar de personas a bordo de 18 veleros con el objetivo de seguir los pasos del apóstol, un viaje que los ha llevado a recorrer toda la costa cantábrica y atlántica, y que ayer los hizo echar amarras en Boiro procedentes de Muros, donde habían tomado tierra el día anterior.
Esta singular expedición, conformada en su mayor parte por peregrinos de origen francés, pero también por grupos de argentinos, mexicanos y españoles, forma parte del proyecto El Camino a Vela, que este año llega a su octava edición y que cuenta con el impulso del Instituto Marítimo Español y la Asociación Nacional de Empresas Náuticas, además de fondos Next Generation.
Todos los participantes desembarcaron ayer al mediodía en las instalaciones del club deportivo Barraña de Boiro, desde donde luego se desplazaron al pazo de Goiáns para ser recibidos por el alcalde en funciones, José Ramón Romero. Además de conocer esta histórica construcción boirense y su historia, también pudieron degustar una comida elaborada a base de productos locales, y ya por la tarde se dispusieron a recorrer los enclaves más turísticos del municipio, por donde también atraviesa la ruta jacobea A Orixe.
Federico Fernández Trapa, capitán de la travesía, reconoció que esta edición está siendo todo un éxito «y los participantes están todos alucinados con las rías, con la gastronomía, y con el buen ambiente». Entre las singularidades de este año está la participación «de dos barcos de México y Argentina que nos conocieron a través de las redes sociales y que se han cruzado el océano para sumarse a esta ruta».
Sin oleaje
Otra novedad con la que se han encontrado es que durante todo el tiempo que llevan navegando apenas se han registrado jornadas de marejada y viento que hayan complicado la travesía. «Esto cada vez se parece más al Mediterráneo. Llevamos un mes sin tener olas ni en el Cantábrico ni en el Atlántico», destacó Fernández Trapa.
Muchos de los participantes viajan acompañados de toda familia o con un grupo de amigos, y la media de edad de esta edición ronda los 56 años, lo que supone una bajada con respecto a las anteriores en las que había más peregrinos que estaban jubilados. Independientemente de si son más jóvenes o más mayores, con lo que también están disfrutando todos es con la gastronomía española, e incluso se atreven a participar en un concurso de cocina. «En Euskadi nos dieron los cuatro primeros bonitos de la costera, y en Galicia merluza del pincho, y eso se cocina todo a bordo y se premia los mejores platos», apuntó Federico Fernández.
Un recorrido parando en 13 puertos deportivos de cuatro comunidades
Fue el 6 de junio cuando la expedición partió de la ciudad francesa de La Rochelle para iniciar una travesía que los llevaría a recorrer 13 puertos deportivos de cuatro comunidades autónomas. Así, los 18 veleros han tomado tierra en Hondarribia, Bermeo y Getxo, en el País Vasco; Laredo y Santander, en Cantabria; en el muelle asturiano de Gijón, para luego recalar en Galicia, donde visitaron Cedeira, A Coruña, Muxía Muros, Boiro y hoy finalizarán el viaje en barco en Vilagarcía de Arousa. A continuación, realizarán la ruta Traslatio remontando el río Ulla hasta Padrón, y el jueves irán a pie hasta Santiago. Esta es la octava travesía El Camino a Vela, que este año ha llevado por lema Educación Azul, puesto que el objetivo que se han propuesto es «acercar el mar a la gente y la gente al mar, visibilizando las profesiones marítimas como salida al empleo, especialmente entre los más jóvenes».