La institución encargada de expedir la compostela sumó nueve itinerarios a sus estadísticas a lo largo del 2022
22 sep 2022 . Actualizado a las 05:00 h.A principios de año, antes de vislumbrar el récord de peregrinos, cuando las mascarillas aún formaban parte del outfit en interiores y el certificado de vacunación era un imprescindible en la cartera, pocos se atrevían a vaticinar el futuro cercano del Camino de Santiago. La Oficina del Peregrino mostraba con timidez la llegada de un puñado de peregrinos cada día. A día de hoy la situación es muy distinta. Los itinerarios lucen ahora abarrotados. Tanto, que incluso aparecen caminantes por trayectos que antes, aparentemente, no existían. El 2022 no solo es un año récord en el número de peregrinos, sino en el de caminos que llegan a Santiago. La prueba está en las estadísticas de la Oficina del Peregrino, que ya recogen 19 rutas.
A 31 de diciembre del 2021, las estadísticas oficiales diferenciaban nueve rutas: Camino Francés, Camino Portugués, Camino Portugués por la Costa, Camino Inglés, Camino Primitivo, Camino del Norte, Camino de Invierno, Vía de la Plata y Camino de Fisterra y Muxía. A ellas se sumaba la categoría «otros caminos», lo que hacía un total de diez.
A lo largo de este 2022, los «otros caminos» comenzaron a tener nombre. Mes a mes, la lista se alargaba al paso de los peregrinos que los transitaban hasta duplicar, literalmente, las categorías. A las nueve rutas se sumaron otras nueve: Camino de Muros e Noia, Camino del Barbanza, Miñoto Ribeiro, Geira e Arrieiros, Camino del Mar, Camino Olvidado, San Salvador, San Rosendo y la Vía Céltica. Con menos servicios, pero también menos masificados, son los nuevos Caminos de Santiago.
Camino de Muros e Noia
De piedra a piedra, el Camino de la Ría de Muros e Noia une dos localidades marcadas por los edificios rocosos y los soportales. El encanto marinero de Muros se encuentra a tan solo 80 kilómetros del espectacular patrimonio de Santiago. Aunque no sean los suficientes para obtener la compostela, sí lo son para disfrutar de la paz y la naturaleza. La ruta fue reconocida como oficial por la iglesia en diciembre del 2020.
El itinerario tradicional parte de Muros, bordea la orilla norte de la conocida como A Ría da Estrela y pasa por la Serra de Outes hasta llegar a Noia. Desde allí, se adentra hacia el interior a través de Lousame, por la parroquia de San Xusto. Atraviesa los municipios de Rois, por Urdilde, Brión, por Alqueidón, y Ames, por Bertamiráns, hasta llegar a Santiago. Además, existe una variante que sale de Porto do Son y discurre en paralelo al margen sur de la ría hasta enlazar con el trazado original en Noia.
En cuanto a la división por etapas, la página web de la ruta recoge 11 tramos. Sin embargo, si se toma como referencia el resto de itinerarios, con una media de unos 20 o 25 kilómetros diarios, se podría hacer en tres o cuatro días.
Camino del Barbanza
Los itinerarios con salida de la costa triunfan en los últimos años. Tanto, que el antes mencionado tiene un vecino al sur de la ría. El Camino del Barbanza, también conocido como A Orixe, fue reconocido como oficial en marzo del 2021. Une el faro de Corrubedo, en Ribeira, con la capital gallega a través de 120 kilómetros y seis etapas.
El Camino del Barbanza sigue el curso de la ría de Arousa y el río Ulla, tal como, según la leyenda, hicieron los restos del apóstol. Un recorrido que permite descubrir la orilla norte de la paradisíaca ría arousana sin masificaciones. Con salida de Ribeira, pasa por los municipios de A Pobra, Boiro y Rianxo hasta comenzar el ascenso por el río Ulla a través de Dodro. En Padrón se une al trazado del Camino Portugués.
Existe la posibilidad de realizar una ruta marítimo-fluvial con alguna de las empresas que fletan embarcaciones desde Ribeira. Bastaría con desembarcar en Padrón, en el mismo puerto al que se supone que llegó la barca con los restos de Santiago, y continuar los últimos kilómetros a pie.
Vía Céltica
También con salida desde el litoral, pero ya lejos de las pacíficas aguas de las Rías Baixas, llega la Vía Céltica. Se trata del itinerario histórico que seguían quienes partían de alguno de los puertos de la Costa da Morte o de la comarca de Bergantiños, pasando por Santa Comba. Es una de las últimas rutas que se colgó el sello de oficial, al ser reconocida en diciembre del pasado año.
Hay dos variantes. Una, con salida de cualquiera de los puertos de Bergantiños: Laxe, Ponteceso, Corme, Barizo, Malpica y Caión. Como si se tratara de una tela de araña, los diferentes itinerarios se unen hasta hacer uno solo a la altura de Valenza (Coristanco). Así, los de Laxe y Ponteceso se fusionan en A Carga (Ponteceso). Corme (Ponteceso) y Barizo (Malpica) convergen en Nemeño (Ponteceso). Malpica y Caión (A Laracha) recalan en Buño (Malpica) y continúan por Ponte Dona, donde se unen al trazado anterior. Una vez todas las rutas han confluido en Valenza, esta variante norte pasa por Agualada, Castriz y Carboeiro hasta llegar a Paramos, donde se fusiona con la variante oeste.
La variante oeste es la que sale de los puertos de la Costa da Morte: Fisterra, Muxía, Cereixo, Ponte do Porto y Camariñas. Parte del recorrido coincide con el del Camino de Fisterra y Muxía, pero en el sentido contrario, con las flechas amarillas apuntando a Santiago. En realidad, son solo tres trazados distintos, ya que el de Camariñas pasa también por Ponte do Porto y Cereixo, por lo que la única diferencia es el hito kilométrico en el que se comienza a andar. Este se fusiona con el de Muxía a la altura de Quintáns (Muxía). Más tarde, la ruta converge en Romar (Vimianzo) con la que se inicia en Fisterra. El camino continúa a través de O Sixto, Muíño, Vilar de Célticos, Santa Comba y Vilarnovo hasta llegar a Paramos.
Ambas variantes siguen juntas su trayecto hacia Santiago, con paso por Portomouro. Aunque la distancia total varía en función del puerto de salida, hay una condición especial para quienes quieran obtener la compostela. Tal como se informa en la página web de la Vía Céltica, los peregrinos deben completar dos itinerarios: uno desde la Costa da Morte y otra desde Bergantiños. También se puede optar por combinar uno de los trazados a pie con una ruta marítima a vela, si esta supera las 100 millas náuticas.
Camiño da Geira e dos Arrieros
Cambiamos de punto cardinal para descubrir las nuevas rutas que llegan desde Portugal. El Camino da Geira e dos Arrieiros, reconocido por las autoridades eclesiásticas de Braga y Santiago en el año 2019, se dirige hacia Santiago a través la provincia de Ourense y el interior de la de Pontevedra. Su trazado es bastante similar al de otro nuevo itinerario: el Camino Miñoto Ribeiro. Una situación que ha provocado más de una guerra de cifras y polémica en los territorios que atraviesa.
El itinerario entra en Galicia por Lobios, lo que permite disfrutar del parque natural de la Serra do Xurés. Durante las etapas iniciales en la comunidad, cruza la frontera lusogalaica en más de una ocasión. Continúa su recorrido por la provincia de Ourense a través de Cortegada, A Arnoia, Ribadavia, Pazos de Arenteiro (Boborás), Soutelo de Montes, Forcarei, A Estrada (por Codeseda) y Pontevea hasta llegar a Santiago.
Miñoto Ribeiro
La otra cara de la polémica, el Camiño Miñoto Ribeiro, sigue un trazado bastante similar al de Geira e dos Arrieiros, con salida desde Braga. Mientras la guía oficial de la ruta recoge que también se adentra en Galicia a través de Lobios, el certificado con que el la catedral lo reconoció como oficial en el 2020 señala que pasa por los municipios portugueses de Monçao y Melgaço, por lo que transcurriría en paralelo al río Miño en su tramo pontevedrés. Algo que imposibilitaría la entrada por Lobios.
En cualquier caso, una vez se adentra en Galicia, su trazado continúa de forma casi paralela al de Geira e dos Arrieros. Así, pasa también por Cortegada, A Arnoia, Ribadavia, Pazos de Arenteiro (Boborás), Soutelo de Montes y Forcarei. Es en este punto donde se produce la mayor división en territorio gallego de ambos itinerarios. El Camino Miñoto Ribeiro se desvía hacia el lugar de O Foxo, en A Estrada, y continúa por Vedra, donde se une a la Vía de la Plata.
Camino de San Rosendo
También con salida de Braga, el Camino de San Rosendo se postula como otra variante de las rutas que llegan desde Portugal. Igual que sucede con los itinerarios antes mencionados, este accede a Galicia a través de Portela de Home y tiene en Lobios su primera parada en la comunidad. Sin embargo, en esta localidad toma dirección nordeste, hacia Bande, por lo que se desvía de posibles polémicas. Prosigue su curso por Celanova —de donde surge el nombre, ya que el santo ejerció una gran influencia en el municipio durante la Edad Media— hasta llegar a Ourense, donde entronca con la Vía de la Plata.
El Camino de San Rosendo sigue la histórica peregrinación de Isabel de Aragón, reina consorte de Portugal, en el siglo XV. Conocida como Rainha Santa, emprendió su ruta a través de la Vía Nova. Por eso, este itinerario permite descubrir el legado romano en la comunidad, así como atravesar el parque natural transfronterizo de la Serra do Xurés. Existe también una variante en la última etapa (Celanova-Ourense) por un tramo del Camino Natural, que sigue el trazado de distintas calzadas romanas desde el campamento de Aquis Querquennis, en Ourense, hasta Foz, en la provincia de Lugo, tal como recogen los registros del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Camino del Mar
Del sur, vamos al norte. Y literalmente. El Camino del Mar une el Camino del Norte con el Inglés siguiendo el relieve del Cantábrico. Así, se bifurca del trazado tradicional en Ribadeo y atraviesa el litoral de Lugo, conocida como A Mariña lucense, y de Ortegal hasta llegar a la ría de Ferrol. Permite descubrir una de las zonas de costa más desconocida de Galicia, donde el mar salvaje forma tesoros naturales como la playa de As Catedrais, O Fuciño do Porco o los acantilados de Vixía de Herbeira.
El Camino del Mar se desvía del trazado del Norte en Ribadeo y pasas por los municipios de Barreiros, Foz, Burela, Cervo, Xove y O Vicedo hasta entrar en la provincia de A Coruña. Continúa por Mañón, Ortigueira, Cedeira y Valdoviño hasta llegar a Ferrol, donde arranca la ruta inglesa. Existen variantes que, en lugar de seguir toda la costa atlántica, se internan hacia el municipio de Neda, una de las primeras paradas del Camino Inglés.
Una de las singularidades de este by pass costero es que permite hacer dos peregrinaciones en una. Existe una aldea entre acantilados, en el municipio de Cedeira, llamada Santo André de Teixido a donde se debe ir al menos una vez en la vida o, como castigo, acudir una vez muerto. Tal como señala el refranero gallego, «vai de morto o que non foi de vivo». Según la leyenda, fue promesa que Dios le hizo al santo al ver que los peregrinos iban a Santiago pero no a su templo.
Camino de San Salvador
Existen más rutas que sirven para saltar de un trazado a otro. Ejemplo de ello es el Camino de San Salvador que, fuera de las fronteras gallegas, une la catedral de León, en el Camino Francés, con la de Oviedo, punto de salida del Primitivo. El templo asturiano es, de hecho, otro de los puntos de peregrinación católicos, ya que salvaguarda numerosas reliquias que atraían la devoción de los peregrinos en el medievo. Así lo indica el refrán: «Quien va a Santiago y no a Salvador, sirve al criado y deja al señor». Este itinerario cuenta incluso con su propia credencial: la salvadorana.
Camino Olvidado
También fuera de territorio gallego se encuentra el Camino Olvidado. Se trata de una alternativa al Camino Francés que utilizaban los peregrinos para evitar las guerras de la época de la reconquista. Parte de Bilbao y pasa por las provincias de Burgos, Cantabria, Palencia y León hasta entroncar con el itinerario Francés, en Villafranca del Bierzo.